Si aún no estás familiarizado con la raza Shih Tzu y deseas conocer toda la información importante antes de tomar la decisión de adoptar uno de estos cachorros, has llegado al lugar indicado. Al finalizar esta guía, serás un verdadero experto en los aspectos más importantes relacionados con este excepcional perro, incluido el precio del Shih Tzu.
Desde su origen, esta raza ha sido criada principalmente para servir de compañía, por lo que se considera al Shih Tzu un perro afectuoso con sus amos y demás miembros del hogar. Desde la antigüedad, estos perros se han sentido cómodos con los largos descansos en el regazo de sus dueños, por lo que, si buscas un compañero al cual dedicar todo tu cariño, este perro es ideal para ti.
Con un rango de peso que va de 5 a 10 kilogramos, y una altura promedio de 25 cm, el Shih Tzu es considerado como una raza de perro pequeña, clasificado como perro de compañía por la Federación Cinológica Internacional (FCI). Es una raza braquicéfala, es decir, de cráneo redondeado, hocico chato y corto, y ojos prominentes. Además, el Shih Tzu es prognato, lo que significa que su mandíbula inferior se ubica por delante de la superior.
El pelaje puede ser de distintos colores, siendo especialmente valorados los tricolores, que tienen marrón blanco y negro con perfil de las orejas y puntita de la cola coloreadas en negro.
Su cuerpo es más largo que alto, de complexión robusta y bien proporcionado. Expone su cola alegremente y esta se enrolla sobre el lomo. Los pasos son apresurados y alargados, algo llamativo en un can tan pequeño. El pelo del Shih Tzu es de doble capa, alargado y de textura lisa. Este abrigo requiere mucho mantenimiento, particularmente si la preferencia del propietario es dejar que crezca.
Se aceptan todos los colores para el Shih Tzu, pero siempre debe tener una coloración oscura alrededor de los ojos y la trufa. La esperanza de vida de la raza varía de 14 a 15 años.
Estamos seguros de que alguna vez has visto a un Shih Tzu en vivo y en directo. Como sabrás, derrochan alegría y su temperamento es el de un perro tranquilo. Es simpático, fanático de los juegos y se lleva bien con cualquier tipo de persona o mascota. Debes tener especial cuidado con los niños, ya que el perro tiende a saltar excesivamente y puede lesionarse con facilidad.
En definitiva, se trata de una excelente mascota familiar, con la que no solo tus hijos, sino tus visitantes se divertirán y vivirán momentos inolvidables.
Debido a su condición de perro braquicéfalo, al Shih Tzu se le dificulta morder, por lo que no deberás preocuparte por que rompa tus cosas con los dientes. Sin embargo, le encanta excavar, por lo que deberás tener cuidado si tienes un patio o jardín con tierra. Al igual que otras razas de perros pequeños, estos perros tienen tendencia a ladrar en exceso, por lo que deberás ser paciente durante el entrenamiento y socializarlo constantemente.
Estos perros están impulsados por un gran deseo de pasar el tiempo con sus personas favoritas, y tranquilamente podría disfrutar de una siesta larga en tu regazo si así lo permites. Para mantenerlos equilibrados y felices, se recomienda brindarles una jornada de ejercicio moderada cada día. Como cualquier raza, los shih tzus deben estar bien socializados y educados, si no pueden crear demasiada dependencia a con sus dueños, ansiedad ante separación, etc.
El Shih Tzu es una de las razas de perros más antiguas del mundo, cuyos orígenes se remontan al Tíbet, alrededor del siglo VII. Sin embargo, existe evidencia arqueológica de perros similares a esta raza que vivieron en China desde el año 8,000 a.C. Algunos historiadores consideran que este cachorro fue criado por los monjes tibetanos a partir del cruce entre diversas razas chinas y el Lhasa Apso o el Pekinés. El Shih Tzu habría sido un bien preciado por la cultura tibetana, y se ofrecía como obsequio al emperador y los miembros de la realeza.
Shih Tzu significa “perro león” en chino, lo que tiene sentido, dado que este término también se asocia con su ancestro directo, el Pekinés. A lo largo de su historia, el Shih Tzu aparece en relatos, pinturas y obras de arte antiguas, siempre descrito como un perro león inteligente, amoroso y dócil. En la década de 1860, el Shih Tzu ganó popularidad en la Corte Imperial china, luego de que la emperatriz T’zu Hsi prohibió que se torturara a estos canes.
En los años posteriores, el Shih Tzu se mantuvo como un perro exclusivo de la realeza, e incluso algunas familias reales comenzaron a criar ejemplares para tener “la mejor versión de la raza”. Una vez iniciada la cría selectiva, comenzó el contrabando de perros y su venta a extranjeros. De esta forma, en 1928, el primer Shih Tzu es llevado a Inglaterra y, desde allí, su internacionalización fue imposible de detener. En 1969, la raza fue reconocida formalmente por el American Kennel Club dentro del grupo de perros de juguete.
El Shih Tzu es un perro que se adapta bien a cualquier entorno siempre y cuando esté en compañía de su propietario. Sin embargo, debes tener en cuenta que es un perro dedicado a la vida doméstica, y como tal, no debe ser encerrado en jardines o patios. Para sentirse feliz, el Shih Tzu necesita un par de caminatas cortas cada día y una jornada pequeña de acurrucarse en tu regazo. Los juguetes y los juegos que impliquen correr por toda la casa también le encantan.
Como ocurre con las razas de perros braquicéfalos, el Shih Tzu es sensible a los climas cálidos. Si vives en una zona tropical, asegúrate que el lugar donde duerme tu perro esté bien ventilado, y si tienes aire acondicionado, mucho mejor.
Otro aspecto que debes tener en cuenta es que al Shih Tzu le encanta dar saltos por toda la casa. Puede ser desde el mueble al suelo, o de una cama a otra. Lo cierto es que estos saltos pueden traducirse en lesiones y conmociones cerebrales.
En cuanto a la alimentación, esta raza tiende al sobrepeso, es conveniente estar atento a que no coma en exceso.
El pelaje requiere cuidados especiales, que incluyen cepillarlo diariamente para evitar cualquier nudo y realizar baños con cierta frecuencia, si es posible, una vez cada dos semanas.
La cara del Shih Tzu también requiere de tu atención, y es que este perro tiende a ensuciarse mucho, especialmente tras cada comida. Además, sus ojos se llenan de legañas rápidamente. Basta con limpiar regularmente su cara con un paño húmedo para mantenerlo saludable. Finalmente, encárgate de cepillar sus dientes de manera regular con un cepillo de cerdas suaves. La pasta de dientes que elijas debe ser especial para perros, ya que de esta manera mantendrás su dentadura y sus encías sanas y fuertes.
El precio de estos adorables cachorros se ubica en un rango entre 700 y 1500 euros, lo que equivale a unos 800-1600 dólares americanos. Es importante que antes de comprar un Shih Tzu precio, te asegures de visitar a criadores certificados y que ofrezcan garantías, ya que hacerlo con vendedores improvisados puede traducirse en un perro con problemas de salud.
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