El kerry blue terrier proviene como su nombre indica del condado de Kerry, en Irlanda, y se originó a comienzos del siglo XVIII. Debido a sus características físicas es ágil y buen nadador por lo que lo usaban para cazar nutrias, zorros y tejones. Entre sus ascendientes se puede incluir a distintos terrier irlandeses, al bedlington, el bull y el wolfhound.
Su nombre proviene de una leyenda que dice que surgió a partir de un terrier azul superviviente de un naufragio y que era tan feroz que mató a todos sus contrincantes y consiguió su propia estirpe. Ha sido durante mucho tiempo la mascota predominante para los patriotas irlandeses.
El kerry blue terrier es un perro de tamaño mediano, musculoso, con apariencia de buen deportista; ágil y fuerte. El cuerpo es corto, con un tórax profundo. El estómago se estrecha bastante. La cabeza es de tamaño proporcionado con el cuerpo y de forma ligeramente alargada.
El hocico es plano terminando en un stop muy leve, con pelo más largo y liso que en el resto del cuerpo, lo que le da una apariencia muy particular. Los ojos son oscuros, redondos y pequeños. Las orejas son semicaídas y con final en forma de V.
El pelo es rizado, suave y muy denso. Los colores incluyen diferentes tonos de azul, con tonalidad más oscura en la zona de la cabeza. Nacen negros y luego se van aclarando, aunque algunos nunca llegan a aclararse del todo. Pueden tener puntos negros o azul oscuro en la cabeza, el hocico, los pies o la cola. Ésta es de inserción alta, recta y de longitud media, aunque a veces se les corta, práctica que está prohibida en muchos países.
El Kerry blue terrier es un perro que no suelta pelo y no huele, por lo cual puede ser adecuado para personas con alergia. En general gozan de buena salud. Necesitan ciertos cuidados, como cepillado habitual o revisión del oído para evitar infecciones, además de sus buenas sesiones de deporte y estimulación.
A los kerry blue les encanta el ejercicio, salir a dar largos paseos, correr con sus dueños y los retos de aprendizaje.
Los kerry blueson juguetones, ágiles y divertidos, les gusta armar jaleo. Son perros graciosos a los que les gusta mucho hacer ejercicio, los retos y los juegos de aprendizaje. Hay que dedicarles bastante atención, con actividades de obediencia, agility, etc. para que no caigan en el aburrimiento. Estos juegos deben ser estimulantes, ya que si son muy fáciles y no le suponen un reto, el kerry se distraerá con facilidad. Necesitan bastante ejercicio diario para estar en forma, sanos física y mentalmente.
Es un perro con un carácter fuerte y protector y es muy bueno como perro guardián: rara vez ladrará sin motivo y no atacará a no ser que se sienta realmente provocado. Además es simpático y se lleva bien con la gente y normalmente también con otros animales. Hay que centrarse en su socialización desde que son cachorros, si no pueden ser desconfiados o miedosos ante gente o situaciones desconocidas.
También suelen ser bastante buenos con los niños. Necesitan un líder autoritario y paciente que les muestre su lugar en la manada y que les haga sentir seguros y tranquilos, ya que además son perros a los que no les gustar estar solos, sino que prefieren estar siempre en compañía de sus dueños.
Son inteligentes y tienen bastante capacidad para el aprendizaje y muy buena memoria para recordar lo aprendido; con adiestramiento en positivo y constancia pueden ser estupendos compañeros.
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