Si eres amante de los perros, habrás notado que estos canes comparten algunos problemas de salud con los seres humanos, incluida la diabetes, la insuficiencia cardíaca congestiva, el cáncer y los trastornos convulsivos. Sin embargo, debido a las obvias diferencias genéticas entre ambas especies, existen afecciones exclusivas del ser humano. Durante mucho tiempo, los dueños de mascotas se han preguntado si existen los perros con síndrome de Down, ya que estos compañeros pueden presentar algunos síntomas relacionados a esta enfermedad.
A continuación, responderemos todas tus dudas sobre la posibilidad de que tu perro pueda sufrir de esta condición.
Índice de contenidos
¿Qué es el síndrome de Down?
Cada célula del organismo humano posee un núcleo, el cual almacena material genético (genes). Los genes son los responsables de llevar los códigos de los rasgos que heredamos y se agrupan en estructuras llamadas cromosomas. Estas estructuras determinan la formación del cuerpo del feto durante el embarazo y luego del nacimiento. Lo común es que el núcleo contenga 23 pares de cromosomas, y la mitad de ellos son heredados de cada progenitor.
El síndrome de Down se produce cuando el organismo posee una copia adicional, parcial o total, del cromosoma 21. Esta alteración, también llamada “trisomía 21” modifica el desarrollo normal del cerebro y el cuerpo del bebé, lo que se traduce en un coeficiente intelectual de leve a bajo y mayores problemas de comunicación con respecto a otros niños. Las personas con síndrome de Down se reconocen por las siguientes características:
- Rostro aplanado, especialmente en la región que conecta a la nariz con la frente
- Cuello corto
- Ojos almendrados (bordes externos simétricos e inclinados hacia arriba)
- Orejas pequeñas
- Manchas pequeñas en la iris (parte coloreada del ojo)
- Lengua que sobresale levemente de la boca
- Manos y pies relativamente pequeños
- Dedos meñiques pequeños
Asimismo, las personas con síndrome de Down tienden a sufrir de enfermedades de los ojos, anemia, trastornos de la glándula tiroides, leucemia, problemas cardíacos, apnea del sueño, infecciones del oído, enfermedad de Hirschsprung, entre otras afecciones.
¿Los perros pueden padecer esta enfermedad?
Como comentamos anteriormente, no existe evidencia científica de perros con síndrome de Down. Tampoco se han realizado estudios sobre el tema, y ello se debe a que la enfermedad responde a una alteración genética que solo ocurre en humanos. Mientras que las personas poseen 23 pares de cromosomas, los perros tienen 39.
La ciencia ha trabajado con ratones modificados genéticamente para estudiar el síndrome de Down en humanos. Dichos ratones incluyen una proporción adicional de su cromosoma 16, el cual contiene genes similares a los del cromosoma 21 de los humanos. Los resultados han demostrado que estos animales pueden padecer algunos de los síntomas del síndrome de Down humano.
Sin embargo, es importante recordar que son ratones cuya genética ha sido modificada. Es decir, no son roedores presentes en la naturaleza. Aunque la trisomía 21 es muy rara en animales, se han reportado algunos casos de esta alteración cromosómica en terneros. Estos bovinos han nacido con anomalías cardíacas y otras condiciones que los han dejado sin vida a pocas horas del parto.
Aunque existen una gran cantidad de artículos en Internet que mencionan presuntos casos de tigres, gatos y perros con síndrome de Down, e incluso se comparten fotos de animales con un aspecto similar al de las personas que sufren esta condición, se trata de información sin evidencia científica. Si bien existen rasgos que nos recuerdan al síndrome de Down en estos animales, estos pueden ser producto de otro tipo de problema de salud o alteración genética.
En este punto, es importante recordar que muchos perros han sido modificados genéticamente a lo largo de su historia con el objetivo de incrementar su rareza y hacerlos más atractivos para la venta. Esto ha modificado los rasgos iniciales de perros como el Pug, el Bulldog Inglés, el Shar Pei, entre otros, y ha incluido problemas graves de salud en estas mascotas que los afectan a lo largo de toda su vida.
Problemas de salud en perros similares a los síntomas del síndrome de Down
A pesar de que, desde el punto de vista genético, no se ha demostrado que los perros pueden padecer esta condición, existen ciertos problemas de salud similares a los síntomas humanos. Estos son algunos de ellos:
- Cabeza más ancha de lo común en ciertos tipos de raza.
- Retrasos en el crecimiento (perro con tamaño menor al promedio de su raza).
- Problemas oculares
- Problemas de la piel
- Problemas del oído
- Dificultad en el aprendizaje básico
- Deficiencia muscular
Muchos de los problemas mencionados anteriormente se producen por factores hereditarios. A causa de esta herencia genética, los perros pueden sufrir enfermedades más graves como el hipotiroidismo, la insuficiencia cardíaca, la hidrocefalia congénita, la derivación portosistémica y la deficiencia de la hormona del crecimiento, entre otras. Si decides adoptar un cachorro y notas algunos de estos problemas a medida que crece, no dudes en consultar con tu veterinario de confianza.
¿Cómo cuidar a un perro con necesidades especiales?
Si tu perro es diagnosticado con alguna condición especial, existen tres aspectos básicos que debes cubrir para garantizar una mejor calidad de vida:
- Cuida su entorno: En caso de que tu mascota sufra algún tipo de retraso cognitivo o de desarrollo físico, debes garantizar que su entorno sea totalmente seguro. El perro debe poder moverse con facilidad dentro de la vivienda y no encontrarse con ningún tipo de obstáculo que pueda resultar perjudicial. Si tu apartamento o casa tiene escaleras, asegúrate de colocar puertas para evitar que caídas y posibles accidentes.
- Vigila su alimentación: Una nutrición adecuada es esencial para el cuidado de un perro con necesidades especiales. Los perros con alguna condición especial pueden requerir dietas exigentes que incluyan complementos nutricionales. Consulta con tu veterinario cuáles son los alimentos que necesita tu mascota para fortalecer sus defensas y vivir al más alto nivel. Evita arrojar comida al suelo y asegura los depósitos de basura de tu vivienda para evitar que tu perro coma algo indebido.
- Cumple con sus necesidades de ejercicio: La necesidad de actividad física de un perro depende de su raza. Consulta con tu veterinario cuáles son los requerimientos de ejercicio de tu mascota, y en caso de que sufra de alguna condición respiratoria o cardíaca, vigila muy bien cualquier paseo. Evita apurarlo o extralimitarlo.
- No te olvides de los juegos: El hecho de que tu perro tenga una condición de salud especial no quiere decir que no tenga que divertirse. Los juegos no solo mejoran su estado de ánimo, sino que además estimulan su desarrollo mental. Los juguetes son excelentes herramientas en este camino, por lo que deberás identificar muy bien cuáles son las preferencias de tu mascota cuando está aburrida y llevar a casa el mejor regalo para mantener su mente ocupada.
- Preocúpate por su descanso: Tu perro necesita un lugar cómodo para descansar y sentirse seguros. Si cuentas con el presupuesto, consigue una cama especial para tu amigo, o puedes construir una con algunas prendas de ropa que ya no uses. Lo importante es hacerle ver que tiene su propio espacio para dormir, al igual que cada miembro de tu familia. De esta forma, estará tranquilo y reducirá cualquier situación que le genere ansiedad.
- Visita periódicamente al veterinario: El veterinario es tu mejor aliado en la búsqueda de la mejor calidad de vida para tu cachorro. Estos especialistas te guiarán mediante métodos de entrenamiento y tratamientos efectivos. Apégate al calendario de vacunas y chequeos de rutina para evitar cualquier sorpresa negativa.
Si tu can tiene una necesidad especial, no debes preocuparte demasiado. Abraza su condición de “especial” y entrégale todo tu cariño que él sabrá apreciarlo. A pesar de que deberás brindarle mucha más atención que a un perro sano, no existen razones para pensar que tu mascota no podrá tener una vida saludable, prolongada y feliz.
Conclusión
Algunas personas suelen asustarse cuando descubren que sus perros tienen necesidades especiales. En ocasiones, estos animales son dados en adopción y no reciben la atención necesaria para tener una vida tranquila. Un perro especial no es necesariamente un problema. De hecho, muchos dueños de mascotas han dado testimonios que avalan que sus perros juegan, se alimentan y viven una vida feliz como cualquier otro perro. Todo depende del tiempo que estés dispuesto a invertir en tu cachorro.
Al igual que las personas, los perros con alguna condición especial poseen una personalidad única. A menudo, estas mascotas no saben que tienen un problema de salud y que son distintos a los demás perros. Por ello, si deseas que tu perro tenga una vida feliz, infórmate sobre lo que debes esperar de su condición para adaptar tu tiempo a su rutina de cuidado diario.